Hablar de retos y desafíos en la transmisión en el Perú es hablar sobre el desarrollo tecnológico, la gestión social, ambiental, predial, el desarrollo de competencias del factor humano y la actualización de la normatividad y regulación que aplica en el sector. Y aunque son cada uno de estos, temas altamente complejos, desde mi perspectiva el gran desafío es uno solo:
¿Cómo hacer converger todos los factores externos, para que se pueda desarrollar en el Perú la transmisión que el país necesita?, y esta no es otra cosa que un desafío adaptativo.
Para superar este reto es necesario que en el sector se tomen decisiones pensando en el largo plazo y con regulaciones que ayuden al desarrollo de los grandes proyectos que el país necesita para seguir impulsando el desarrollo de las peruanas y peruanos.
La toma de decisiones, de forma ágil y empoderada, se tiene que realizar pensando en la transmisión que el Perú del 2030 requerirá. Pensando que nuestra población crecerá, la industria se desarrollará y que finalmente debemos anticiparnos para prepararnos para todos esos cambios.
Interconexión con Ecuador en riesgo
Para ilustrar este último punto, podríamos mencionar la reciente decisión de ProInversión de declarar desierta la repotenciación de 1000 MVA de la línea Carabayllo – Trujillo (aumentando la potencia de 700 MVA a 1.000 MVA) que figura desde el Plan de Transmisión del 2015.
Estos proyectos, lanzados en conjunto desde ProInversión como: “Repotenciación a 1000 MVA de LT CarabaylloChimbote-Trujillo 500 kV” y “Compensador Variable (SVC/ similar) +400/-150MVAR SE Trujillo 500kV”, en principio pudieron ser un refuerzo y otorgados al concesionario que actualmente se ocupa de su operación y mantenimiento, sin embargo, fue puesto en licitación, requiriendo en las bases que se presenten como mínimo dos postores para su calificación.
Esto desde el inicio presentó una gran dificultad: es casi imposible que una empresa distinta se haga cargo de redes que están bajo la administración de otra, dado que tampoco en las bases se identifica el grado de responsabilidad que estos tienen frente a un posible evento.
La operación y administración entonces resulta compleja porque se trata de instalaciones que por su naturaleza son ligadas directa y complementariamente a sistemas de transmisión en operación; además, tendríamos el caso de que para una misma instalación de transmisión se tendrían dos Contratos SGT con obligaciones y plazos de vigencia diferentes.
Como era de esperarse, solo el concesionario actual, que en este caso es Consorcio Transmantaro, se presentó al concurso, y habiendo ya incurrido en distintos gastos para la preparación de la oferta (que iba a ser presentada en mayo próximo), la entidad estatal decidió dar por resuelto el proceso.
¿En cuánto tiempo más se volverá a lanzar esta inversión?
Estamos hablando de un proyecto que tenía una alta prioridad, debido a que permitirá atender la creciente demanda vegetativa e industrial en el norte y para que próximamente se pueda construir la interconexión con Ecuador es fundamental desarrollar el sistema eléctrico de esa zona antes de la interconexión.
Actualmente el norte del país se interconecta con el centro a través de tres enlaces: dos en circuitos en 220kV y uno en 500kV, los cuales permiten atender la creciente demanda en la primera zona descrita.
El enlace en 500 kV se encuentra actualmente al 80% de su capacidad. Esta área se atiende con la producción de generación localizada en el centro del país, principalmente desde el nodo energético ubicado en Chilca; sin embargo, se prevé el ingreso de cargas industriales importantes en el área norte como la Refinería de Talara, Río Blanco, la ampliación de Cementos Pacasmayo, los proyectos langostineros y otros agroindustriales, que para el año 2024 requerirán una carga mayor a 290 MW, por lo que los enlaces presentarán congestión de transmisión por falta de capacidad eléctrica.
Así mismo, hace poco ProInversión convocó el concurso público del nuevo enlace en 500kV La Niña – Piura para atender la demanda de Piura y Tumbes, y en el mediano plazo la interconexión en 500 kV con Ecuador.
Si queremos que está interconexión verdaderamente nos agregue valor, que no tenga imitaciones de transmisión, las consecuencias de declarar la repotenciación de la línea Carabayllo – Trujillo desierta son graves.
Por otro lado, la interconexión nos permitirá comprar energía más económica de Ecuador, dada la complementariedad hidrológica del Perú y cuando se requiera en casos de emergencia. No obstante, se pone en riesgo que nuestro país pueda vender la energía sobrante a Ecuador ya que no se contará con la infraestructura necesaria para ello, perdiendo así, una gran oportunidad de recibir ingresos económicos adicionales que podrían luego invertirse otros proyectos de energía.
La repotenciación de la línea Carabayllo – Trujillo durará 30 meses y la licitación de la interconexión con Ecuador posiblemente saldrá a inicios de 2020. ¿Estamos tomando decisiones de forma ágil en el sector para anticiparnos a este problema?
Licencias ambientales
Otro reto adaptativo que tiene la transmisión es la necesidad de que el Estado ayude con las aprobaciones de las licencias ambientales en el menor tiempo posible, entregar la concesión definitiva del proyecto en el momento en que se firme la Buena Pro y posibilitar la imposición de servidumbres por la vía administrativa.
Estos puntos ahorrarían enormemente los tiempos de construcción de los proyectos, los cuales beneficiarían la entrada a operación de las líneas y subestaciones en el menor tiempo posible.
La aprobación de las licencias ambientales es un gran cuello de botella en los proyectos, sobre todo en los últimos años donde las entidades han sufrido grandes cambios, y el personal a cargo a rotado muchas veces.
Siendo ágiles con las aprobaciones, sin que ello afecte la correcta revisión de los documentos, claro está, impactará finalmente en beneficios para la población que luego disfrutará de un servicio eléctrico de calidad y más confiable.
Generación distribuida
Por otro lado, existe un gran desafío adaptativo que el sector de transmisión debe asumir y ese es el de la generación distribuida, es decir la generación de energía eléctrica por medio de muchas pequeñas fuentes de energía en lugares lo más próximos posibles a las cargas.
Hoy en día, las operaciones de las transmisoras conviven con muchas comunidades a lo largo de sus líneas, y son estas poblaciones las que normalmente adolecen de un servicio eléctrico confiable y de calidad.
Pensando en su realidad, las comunidades podrían tener algún tipo de generación renovable que pueda dotarlos de energía, y es en ese contexto, que seguramente ya no se requerirá la construcción de nuevas líneas de transmisión.
Sin embargo, prevemos que sí se necesitará un respaldo para estas zonas y en ese momento será importante tener un país más interconectado, a través de líneas de transmisión.
Pero este es un reto que vemos venir en el mediano plazo, y para superarlo, el sector deberá estar dispuesto a dar soluciones integrales que el cliente requiera y para beneficio de todos los usuarios de la red.
Innovación
Finalmente, la transmisión enfrenta grandes desafíos tecnológicos que solo con la ayuda de la innovación se podrán superar.
Estos desafíos están relacionados a las fajas de servidumbre, porque cada vez es más difícil construir líneas de transmisión por la cercanía a las comunidades, entonces, tecnológicamente debemos de encontrar la forma de ampliar las capacidades de trasmisión en las líneas existentes.
Una iniciativa podría ser modificar los diseños existentes de las torres que permitan dichos cambios sin necesidad de alterar los recorridos de las líneas.
Diversas soluciones se están explorando también para usar las líneas preexistentes para transportar otros servicios (como internet, cable, teléfono).
Pero en la realidad, aunque la cantidad de propuestas pueda ser infinita, se necesitará también de políticas que impulsen la innovación en el sector, y promuevan el desarrollo de soluciones que estén a disposición del bienestar de las poblaciones.
Nuestra posición es que trabajando articuladamente se podrá hacer frente a los desafíos y retos que la transmisión pueda necesitar en el futuro.
Conexiones que inspiran
En conclusión, hablar de los retos y desafíos en el sector es un tema muy amplio, pero queda claro para Red de Energía del Perú, Consorcio Transmantaro e ISA Perú que todas las soluciones que se den deben estar orientadas a un mismo propósito: procurar el bienestar y desarrollo de los peruanos, pero, sobre todo, de las futuras generaciones.
Por ello, nos direccionamos bajo un fin común, el de transmitir CONEXIONES QUE INSPIRAN con todos nuestros grupos de interés.
Esta frase no solo habla de conectar un punto con otro, como tradicionalmente se enfoca el negocio de transmisión, sino que al hacerlo tomamos conciencia de que conectamos personas, y si conectamos personas, hay vida.
He allí el mayor reto y desafío, pensar en cómo hacer este negocio sostenible, incorporando en él las necesidades de los usuarios que finalmente hacen uso del recurso eléctrico.
Autor:
Carlos Mario Caro
Gerente General de REP.